El estudio de las revistas de arte. Una teoría y una práctica

Dra. Laura Malosetti Costa

(CONICET – IAMK – Tarea IIPC / UNSAM)

 

Dra. Andrea Giunta

(Conicet/Instituto Interdisciplinario de Estudios de Género, UBA)

 

Introducción

Durante nuestra larga experiencia investigando el arte latinoamericano de los siglos XIX y XX, las revistas de arte, tanto como las secciones de arte de los periódicos, han sido fuentes inestimables que nos permitieron construir o demostrar muchas de las hipótesis que guiaban nuestras investigaciones. En tal sentido, las citas de las fuentes hemerográficas funcionaban como fragmentos, o como incrustaciones, que se activaban en torno a un argumento, el cual no siempre (y no necesariamente) observaba la publicación –periódico o revista-- como objeto en sí mismo de investigación.

Sin embargo, resultaba ya evidente la necesidad y la productividad de enfocarse en el estudio de la revista o de la sección de arte como objetos en sí mismos. Las revistas son objetos que requieren, en primer lugar, una aproximación descriptiva compleja: ubicación histórica, periodicidad, tirada, lugar de edición, cantidad de páginas, calidad del papel y de la impresión, dimensiones, diseño, ilustraciones, anuncios, suscripciones, editoriales, colaboradores. Cada uno de esos aspectos resulta ineludible para comenzar a evaluar el peso y la significación de las revistas como artefactos culturales. Pero además es necesario precisar una metodología. ¿Cómo abordar una revista como objeto tratando de volver visible su específica forma de intervención, distinta de una obra, distinta de un libro, distinta de un texto aislado?

En la organización de estas Jornadas, antes de titularlas Ficciones metropolitanas, habíamos pensado en el título de Metrópolis de papel, que desechamos porque en su traducción al inglés perdía eficacia. Metrópolis de papel es, sin embargo, una forma apropiada de nombrar una de las condiciones de la revista, como soporte impreso de un intercambio que puede producirse entre personas que están trabajando juntas, en un mismo espacio urbano (pensemos por ejemplo en un ateneo, un seminario, incluso una conversación en la mesa de un café), o bien a la distancia, unidas por lazos intelectuales, artísticos o políticos. En tal sentido pensamos en las revistas como plataformas materiales de emprendimientos que nacen o llegan a ser colectivos, que suman distintas voces en torno a temas, preocupaciones, proyectos, utopías o deseos comunes a esa comunidad que las produce y que a su vez se produce en ellas. Un ejemplo temprano (y paradigmático) de este tipo de formación de redes internacionales fue la revista Mundial Magazine, dirigida por Rubén Darío entre 1911 y 1914 en París, que funcionó como enclave y plataforma de lanzamiento de un arte hispanoamericano (en particular mexicano) en los años previos a la primera Guerra Mundial[1].

Es cierto que hubo muy diferentes tipos de revistas. Algunas con un fuerte componente comercial, otras dedicadas a temas muy diversos pero que incluían secciones que iban creciendo dentro de ellas hasta cobrar relativa autonomía, revistas que cambiaron de rumbo y se volvieron otra cosa muy distinta de su origen. Se pueden citar muchos ejemplos curiosos y extraordinarios, desde la revista Idilio, orientada comercialmente a un público femenino masivo de temas de actualidad, donde publicaron sus fotomontajes y textos psicoanalíticos Grete Stern y Gino Germani, hasta la revista del sindicato ferroviario Riel y Fomento, dirigida por Rodolfo Franco, artista moderno e introductor de las nuevas tendencias escenográficas en los años 20 y 30 del siglo XX en el Teatro Colón.  

En general, las revistas que seleccionamos para nuestro trabajo en el proyecto Modernidad, vanguardias y neo vanguardias en las Américas: revistas y archivos en la Fundación Espigas. Modernity, Avant-Garde and Neo-Avant-Gardes in the Americas: Journals and archives at Espigas Foundation (1920s- 1950s), apoyado por la J. Paul Getty Foundation, en el marco del cual se inscribe estas primeras jornadas, conforman un tipo de formación intelectual (en términos de Raymond Williams) bastante más específica. En sus páginas se establecieron agendas estéticas y políticas, programas y debates. En ellas también se puso en juego el entusiasmo que proviene del momento formativo de un campo artístico que se activa entre las instituciones de un lugar específico, pero también en un terreno supranacional.

Cuando abordamos la revista como objeto en sí mismo, no como soporte de una cita vinculada a otro argumento, nos introducimos en una historia específica, una historia intelectual que conecta a actores y que a su vez nos dirige a otro archivo: el de la correspondencia. El archivo de Jorge Romero Brest, director fundador de la revista Ver y estimar, contiene, por ejemplo, una correspondencia intensa con Mathias Goeritz, quien desde Guadalajara le enviaba descripciones del campo artístico de esta ciudad. En tal intercambio se tramó un dossier específico dedicado al museo experimenta El Eco, diseñado por Goeritz en la ciudad de México desde su propuesta de arquitectura emocional.

A diferencia de Ver y Estimar, de considerable permanencia (1948-1953/1954-1955), buena parte de estas revistas tuvieron una existencia efímera y un carácter más cercano al de un manifiesto que al concepto tradicional de revista. Algunas, como la ya mítica Arturo de 1944, vieron la luz una sola vez. Pero no es la única. Abundan en nuestro corpus revistas de carácter programático: las que publicó Joaquín Torres García en Montevideo (Removedor entre 1945 y 1953), la mexicana Crisol, las argentinas Arte Concreto (1946), Boa (1958-1960), entre otras.

Desde el punto de vista metodológico hay varias consideraciones que entendemos imprescindibles para abordar estos objetos, aun a riesgo de dejar fuera otros aspectos que pudieran ser cruciales para otro tipo de revistas:

1.- una dimensión temporal y espacial compleja: la temporalidad de una revista debería pensarse no sólo en relación con la historia específica del lugar de su edición sino en relación con otros universos y temporalidades que la revista vincula. A menudo las revistas sirven de puentes o de artefactos mediadores entre historias culturales que no mantienen vínculos concretos, materiales, y que los propios editores de la revista conectan críticamente. Por otra parte, número a número la orientación e intereses de las revistas pueden variar considerablemente (y suelen hacerlo). Por lo tanto, sería un error metodológico caracterizar una revista por su manifiesto inicial sin tener en cuenta las posibles transformaciones a lo largo de su existencia. Citemos un ejemplo cercano en el tiempo: la revista Ramona, publicada en Buenos Aires, en la cual pueden establecerse momentos distintos. Hay una gran diferencia entre la primera época de ramona, cuando la participación de los artistas era decisiva, y el período final, en el que la voz dominante fue la académica. En este sentido se observa la distancia entre los números iniciales, más ligados a los eventos que sucedían en la escena artística de Buenos Aires, con los últimos, cuya estructura se articulaba con dossiers temáticos.

2.- una dimensión económica o comercial: Todas las revistas que vieron la luz pública en formato papel tuvieron necesariamente un aspecto económico y comercial vinculado a su origen y trayectoria. Ya sea en los emprendimientos hechos con fines comerciales como e los que se sostienen por medio de posibles mecenazgos, para llevar adelante proyectos vanguardistas, los aspectos económicos deben estudiar la historia, orientación y trayectoria de las publicaciones. Quiénes las sostuvieron, con qué fines, por qué fracasaron, cuál fue el lugar de la publicidad en sus páginas, etc. Todos estos son elementos importantes a tener en cuenta a la hora de considerar su difusión y su permanencia, su público y sus creadores. Los datos de tirada, los ámbitos de distribución, el precio de tapa y las dificultades (o no) de sus editores son cuestiones inescindibles de las posiciones estéticas e intelectuales que las revistas sostuvieron a lo largo de su existencia.

3.- una correlación de fuerzas en disputa: No conviene considerar a priori ninguna revista como el resultado de un conjunto homogéneo y coherente de voluntades perfectamente armonizadas. En general hubo disputas internas, cambios de rumbo, discusiones (que a veces terminaron con las revistas mismas), agotamiento de proyectos que fueron sustituidos por otros, etc. Las revistas aparecen como articulaciones de fuerzas y voluntades que van dando forma a proyectos más o menos coherentes y sostenidos que suelen sufrir importantes cambios a lo largo del tiempo. Un ejemplo, en tal sentido, es la revista Ramparts en los Estados Unidos (1962-1975), que comienza como una revista de actualidad proveniente de formaciones católicas pero que bajo el efecto mismo de la transformación de la Iglesia después del Concilio Vaticano II (1959) se compromete cada vez más con el tercer mundo y con una aproximación crítica a la historia internacional, que hace de la revista soporte de artículos que hoy constituyen una base documental única. Ramparts publicó, por ejemplo, la serie completa en color de los afiches de la exposición Malvenido Rockefeller realizada en Buenos Aires en 1969, como repudio a la gira de Rockefeller por América Latina. Es el único documento visual de aquella exposición conocido hasta el día de hoy.

4.- una constelación de vínculos intelectuales y estéticos. Las revistas aparecen como nodos de una gran cantidad de trayectorias intelectuales y estéticas diversas. Pueden (y suelen) coincidir en ellas artistas e intelectuales de distintas generaciones: jóvenes vanguardistas reunidos en torno de nuevos ideales, que se vinculan a maestros respetados (escritores, filósofos, críticos, científicos, etc.) que adhieren (o no) a sus ideas. Muchas voces coexisten en las páginas de una revista desde secciones diferentes que representan ideales e idearios comunes o en disputa, en abierta confrontación. Entre las tapas de una revista se suceden secciones y voces que coexisten en forma armónica o incómoda.

5.- una dimensión material y visual. La materialidad de una revista es mucho más que el soporte de las ideas que expresan sus textos. Todas las decisiones concernientes a su formato, precio, calidad gráfica, la elección de tipografías, el diseño gráfico, la inclusión o no de material fotográfico, la inclusión de ilustraciones a color, la reproducción de obras, la inclusión de grabados, todos esos elementos deben considerarse en su conjunto como  programas visuales en sí mismos. Las formas que adopta una revista ponen de manifiesto el programa visual al que se vinculan los textos. Tanto Arte Concreto Invención, como Madí o Perceptismo, con la tipografía, los títulos, la partición y el ordenamiento de la página, son ejemplos elocuentes de esta relación intrínseca entre diseño y programa. Otro ejemplo son las revistas Removedor, publicadas por el Taller Torres García en Uruguay. En este caso, la tipografía manual repone la fusión entre arte y vida y la reacción respecto del diseño industrial que la estética de dicho taller reivindicaba desde un diseño artesanal.

La realización de estas primeras jornadas sobre revistas de arte busca contribuir a una conversación común sobre el objeto revista. El propósito es constituir un archivo reflexivo que, al mismo tiempo que se introduce en los nudos y redes que cada revista configura, contribuye a destacar la necesidad de conservar, digitalizar y archivar las revistas. En sus páginas se materializaron polémicas cuya reconstrucción remite a extraordinarios archivos del pensamiento. Pero al mismo tiempo, se busca destacar su carácter estético, como objeto en sí mismo, en el que pueden visualizarse precisas intervenciones poéticas. Como las obras, las revistas tienen una capacidad configuradora de la historia. No son, en tal sentido, el simple soporte de ideas. Su poder configura distintos momentos en el tiempo. Una revista no solo refleja, también hace, incide, crea.

 

[1] Baldasarre, María Isabel y Laura Malosetti Costa: “Enclave hispanoamericano: el arte y los artistas en Mundial magazine de Rubén Darío”. En: Malosetti Costa, Laura y Marcela Gené (eds.) Atrapados por la Imagen. Arte y política en la cultura impresa argentina. Buenos Aires, Edhasa, 2013.